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martes, 19 de noviembre de 2024
Relatos al punto de tinta
Varios autores
domingo, 17 de noviembre de 2024
Solo aquello que se ha ido nos pertenece
CONVOCATORIA CADA JUEVES UN RELATO...
Mónica desde su blog Neogéminis está semana nos propone:
PALABRAS DE OTROS
«Mónica nos dice... Esta vez la consigna es bastante simple: utilizar las frases de célebres escritores y pensadores que les dejo a continuación, para inspirarse y construir sus propias historias».
Lee las frases y los participantes AQUÍ
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Si la seguridad es básicamente una superstición, me preguntó por qué te acochas bajo el alféizar de la ventana. Supongo que por causa del argüende que tus amigas han ido soltando en un grupo que hasta ayer era inseparable. Sigo mirando aquí, inmóvil, y sigues incapaz de mostrarte. Seguramente en algún lugar debe haber un basural donde están amontonadas las explicaciones.
Este viento ábrego empieza a ser insoportable. ¿Por qué me castigas así? Recuerdo la primera vez que te vi; ibas teñida de rojo por el sol de la tarde, por el crepúsculo ensangrentado del cielo. Tu melena ondeaba al viento y tu sonrisa golpeó mi pecho de tal forma que fue como una daga que se clava directamente en el corazón. Siento las llamas dentro de mí, como un haz de luz ocre que se traduce en otra cosa que no es el fuego dentro de la atalaya de la que no te puedo atisbar. El infierno está vacío, y todos los demonios están aquí.
Nunca imaginé que me harías esto. Al enterarme estuve a punto de... Pero la violencia es el último recurso del incompetente. Y yo soy incapaz. Prefiero perdonar. Él no es mejor que yo. Aunque deseaba despedirme de ti, claro que con esta barahúnda la confusión es como una anárquica mezcolanza. La verdad es raramente pura y nunca simple.
Tal vez, para ti ocultarte entre las paredes de tu hogar, sea el castigo de tu delito. No lo sé. Sin embargo, no te guardo rencor. Cada acto de amor es un ciclo en sí mismo, una órbita cerrada en su propio ritual. Y el nuestro se ha quebrado como una manzana que se parte en dos. He de suponer que cada uno tenía su pasado encerrado dentro de sí mismo. El mundo no se ha parado, gira a nuestro alrededor, y por eso me siento como un escribano dolioso, pero cansado de mirar hacia la ventana; tengo la seguridad de que sólo aquello que se ha ido es lo que nos pertenece.
Adiós, mi amor. Mantén siempre tu cara hacia el sol y las sombras caerán detrás de ti. Puede que algún día alcances la paz que mi corazón alberga, y logres encender de nuevo el fuego en tu hogar, porque ahora, la soledad y el rechazo son tu compañía. ¡Adiós, mi amor!
viernes, 15 de noviembre de 2024
El ciclo del universo
Microrrelato "El ciclo del universo".
El universo nos envuelve con su intrincado manto de enigmas, como una anamorfosis cósmica, donde todo depende de la perspectiva desde la que se mira. Cada noche, el cielo se despliega ante nosotros, y revela su anatomía estelar, con astros cuyos símbolos parecen dibujar caminos ocultos, cual galaxia de Andrómeda danzando en una sinfonía armoniosa.
Las estrellas, como centinelas del tiempo, parpadean en el horizonte, y susurran a los pies de centauro historias de un pasado tan remoto como insondable. En este oscuro escenario, los planetas siguen trayectorias invisibles, y las galaxias se distancian como símbolos que se desvanecen lentamente en la lejanía, tal como lo haría una figura deformada que sólo revela su verdadera forma vista desde el ángulo correcto, como en una anamorfosis. Somos pequeños, apenas un punto en la inmensidad, buscando con ansias descifrar los misterios que nos anteceden y nos suceden.
Por ello me cuestiono el principio y el fin del planeta, y el lugar que ocupamos en este diseño cósmico. Pero el universo, con su silencio inmenso y profundo, no ofrece respuestas, sino más bien nuevas preguntas. Y sin embargo, sigo observando cada símbolo, cada enigma, en alguna estrella distante, donde quizás se encuentre inscrita nuestra historia, esperando ser descubierta por quienes persisten en desentrañar los secretos de este eterno universo.
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La anamorfosis es un tipo de artificio óptico en el que las imágenes se representan con proporciones alteradas y son reconocibles solo cuando la imagen se observa desde un punto de vista específico o utilizando instrumentos de distorsión. Leonardo da Vinci fue el autor de algunos de los primeros ejemplos conocidos de anamorfosis pictórica identificados y estudiados.
"...Y si pintáis esto en una pared frente a la que os podáis mover libremente, se verá desproporcionado... y si a pesar de ello queréis pintarlo, será necesario que vuestra perspectiva se vea a través de un solo agujero... Leonardo da Vinci, Codex".
El Hombre de Vitruvio es un famoso dibujo acompañado de notas anatómicas de Leonardo da Vinci un genio científico, realizado alrededor de 1490 en uno de sus diarios. En este dibujo Leonardo considera que simboliza a la vez la simetría del cuerpo humano y, a partir de ésta, la del universo al completo, la Tierra y el Paraíso respectivamente.
Esta es una de las imágenes científicas más simbólicas y populares de Leonardo da Vinci. Este dibujo, que muestra a un hombre en dos posiciones superpuestas con los brazos y las piernas extendidas dentro de un círculo y un cuadrado, simboliza la búsqueda de la armonía, la proporción, la simetría, y la geometría básica en el cuerpo humano. La teoría del hombre de Vitruvio sugiere que el cuerpo humano puede encajar, en un círculo perfecto, representando la relación entre el hombre, el universo y la idea de que el ser humano es la medida de todas las cosas. El cuadrado y el círculo no son solo formas; son símbolos de perfección y unidad, capturando la esencia de lo que somos.
Leonardo decía: «El arte y la ciencia no son frenemies; son los mejores amigos». El dibujo no es solo una imagen; es un símbolo de perfección, equilibrio y la creencia de que todo en el universo está conectado.
Esta entrada participa en el blog de narrativa científica Café Hypatia en la convocatoria de relatos #PVsímbolos de los #polivulgadores de @hypatiacafe del 15 de noviembre de 2024.
jueves, 14 de noviembre de 2024
Duelo a muerte
MES HORROR
Al final de cada cacería, los demonios marchan hasta el ojo de Crotton, para entregar su presente a la malévola reina del infierno. Esta les reta en un nuevo un desafío para que la alianza con Satanás no se desmorone. En la ronda final, los más salvajes y malvados se enfrentan en un duelo a muerte donde deben recoger las reliquias de la reina para escapar de las fauces del fuego, antes, de que se agote la arena que fluye rápido por el reloj.
martes, 12 de noviembre de 2024
Los intocables
Entró en aquel tugurio llamado La Poderosa. Se sentó en un taburete de la mugrienta barra y pidió una copa de vino. Le sirvieron un vino tinto más rancio que su corazón, claro que al ver la etiqueta lo entendió: Sin Palabras.
Tal y como se quedó tres meses atrás, al llegar a su casa y encontrar a su mujer en la cama con su hermano. Desde entonces el vino era su única compañía. No montó un espectáculo, no, no era su estilo. Simplemente, se marchó. Avisó a su secretaria que se ausentaría durante un año, se compró una Harley y se marchó a ahogar sus penas. Sin embargo, aún podía oler el cuerpo de Leila. Se maldecía cada vez que su olor atravesaba su mente. Ella le había llamado en varias ocasiones, pero jamás le respondió.
Absorto en su pensamiento entre trago y trago, no advirtió el Malandra que acababa de entrar en aquel lugar alejado en medio de la autopista. Tras él varios moteros, en cuya chaqueta de cuero en letras rojas se leía; Los Intocables. Pidieron jarras de cerveza y se sentaron en una vieja mesa. Apenas empezaron a beber su birra, él ya iba por su tercera copa de vino. Uno de los moteros se dirigió a la barra y pidió otra jarra. Entonces lo miró de arriba a abajo. Él lo ignoró.
—¿Pasas de mí, forastero? —preguntó con muy malas pulgas.
Él siguió con su copa de vino sin inmutarse.
—Te estoy hablando. ¿Eres idiota? —Su tono mostraba que iba muy en serio su enfado.
—Pírate, —respondió mostrando lo molesto que estaba.
El motero, furioso ante su indiferencia, le lanzó un puñetazo que él logró esquivar.
El resto de los moteros se levantaron. Lo rodearon. Pero él, con gran destreza, noqueó a los dos de su derecha. Los otros no salían de su asombro. Con ojos de furia se dispusieron a arremeter contra él; sin embargo, con un ágil golpe arrastró al que parecía ser el jefe hacia la mesa, golpeándole tan fuerte que lo dejó cao.
—Jaque, mate imbécil, —añadió y levantó los puños hacia el otro hombre que al ver a su jefe salió a prisa por la puerta.
Él se limitó a pedir otra copa de vino.
sábado, 9 de noviembre de 2024
El último judío
Editorial EDB FICCION
Edición 1999
Idioma Español
Tapa dura 464 páginas
Peso del producto 830 g
Sinopsis
España. Siglo XV. Cuando Yonah es separado de los únicos miembros de su familia que quedan con vida, se ve forzado a abandonar su hogar en búsqueda de un nuevo lugar donde poder establecerse sin tener que renunciar a sus creencias.
Contrario a la conversión e involucrado además en la investigación del robo de reliquias, inicia un largo periplo por la España de la Inquisición, durante el cual deberá recurrir a su ingenio para salvaguardar su secreto. Los cambios continuos de identidad y de oficio serán duros de encajar, pero las dificultades no harán sino forjar su personalidad y reafirmar sus orígenes.
Desde sus días de pobreza y soledad hasta sus últimos años como reputado médico, seguimos la vida de este extraordinario personaje y de un no menos interesante periodo histórico, en el que las traiciones e intrigas estaban a la orden del día.
Opinión
Novela histórica entretenida, cuya trama se desenvuelve a mediados del siglo XV, época en la que los Reyes Católicos ordenaron la expulsión de los judíos de España. El viaje iniciático de Yonah le sirve al autor como eje central de una novela que, a modo de tapiz, abarca desde la descripción minuciosa de los acontecimientos históricos y el análisis de la compleja convivencia entre judíos y cristianos, hasta la disección de la vida interior de un hombre sometido a unas circunstancias excepcionales
Yonah como protagonista, o Ramón Callicó, nombre que utiliza para esconder su origen judío, la novela ilustra las enormes dificultades que, tanto judíos conversos como judíos ocultos, vivieron en la España inquisitorial. La historia de Yonah es la historia de miles de judíos que a lo largo de varios siglos, se han visto obligados a huir para proteger su vida, teniendo que abandonar lo que tienen, desplazarse en busca de un lugar donde establecerse, desarrollar nuevas identidades, aprender nuevos oficios e iniciar una nueva vida, para tener que huir nuevamente cuando su origen se descubre y su vida vuelve a correr peligro. Se trata de un drama que ha desencadenado numerosos conflictos a lo largo de la historia y cuyo fin no parece verse cercano.
Es una novela de fácil lectura, bien documentada y ambientada, que nos permite ubicarnos fácilmente en la época y aprender sobre la historia, la religión y las costumbres judías. Sin embargo, la trama resulta algo forzada y el final muy previsible. Es una pena que no se haya tirado un poco más de la historia y costumbres de los judíos en España, entre otras cosas. Se ha centrado en un par de inquisidores y las vivencias de un judío, cuando la historia, pienso, que daba para mucho más.
Aún y así la recomiendo.
Está reseña participa en el reto 24 quilos de conocimiento
Al despertar
Llegó el Tertulab de noviembre desde el el blog A los cuatro vientos con esta bella frase de Julio Cortázar. Si quieres participar entra AQUÍ
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Cada mañana, al despertar, te reinvento. En la niebla de mis sueños, dibujé tu sonrisa y el rastro de tu voz. En la pizarra de lo que será, trazo líneas inciertas, bocetos que borras con el primer parpadeo del día. No importa cuánto te imagine o te esboce, siempre te desvaneces antes de existir. Pero persisto, repitiendo el ritual de crearte, de dibujarte en el aire, como si así pudiera retenerte un instante más. Todo mañana es la promesa de tu presencia, aunque sé que siempre serás el borrón que nunca se queda.
viernes, 8 de noviembre de 2024
Nuestra primera cita
Participación en el reto de Ginebra Un libro abierto
SIGUE LA FRASE...
Nuestra primera cita fue volar en globo; también fue la última al descubrir que tenías miedo a las alturas. Al principio, todo parecía perfecto: el suave balanceo del globo mientras ascendíamos, el horizonte pintado de colores cálidos, y tú, nervioso pero sonriente. Sin embargo, a medida que subíamos, tu sonrisa se desdibujaba y tus manos empezaron a temblar. Traté de calmarte con bromas y señalarte lo hermoso del paisaje, pero tus ojos ya no se fijaban en la vista, solo en el suelo que se alejaba cada vez más y cuando el globo alcanzó su altura máxima, te aferraste al borde, pálido, murmurando que necesitabas bajar. La magia del momento se había desvanecido, y todo lo que quedaba era tu terror palpable. Al aterrizar, me miraste con una mezcla de disculpa y vergüenza, y ambos supimos, sin necesidad de palabras, que ese sería nuestro último vuelo juntos.
Un mundo en silencio
Adella Brac nos propone crear un Microrrelato de cinco lineas; este mes las palabras propuestas para el Reto5lineas son:
Derroche, estado y atención
En medio del derroche de luces y sonidos, Laura caminaba en un estado de desconcierto y soledad. Su atención se deslizaba de rostro en rostro, buscando algo familiar entre la destrucción. La multitud seguía su curso, indiferentes unos de otros, pero ella sentía que el mundo se desmoronaba en silencio a su alrededor. De repente, una mano en su hombro la trajo de vuelta de sus pensamientos. "Estoy aquí", susurró una voz conocida. Y entonces el mundo recobró la luz a su alrededor.
VALENCIA SOMOS TODOS
martes, 5 de noviembre de 2024
En el armario
Este mes José Antonio en su VadeReto y Cristina Rubio nos proponen un reto conjunto: Acervo de letras y Alianzara
Cuyo tema es del género de terror y su propuesta el:
El espacio
Noelia siempre había temido las sombras del armario. No sabía por qué, pero había algo extraño, algo antinatural en ese espacio oscuro, en el fondo, donde ni la luz del pasillo parecía poder entrar. Sin embargo, el día en que los gritos de sus padres retumbaron más fuerte que nunca, ella no tuvo opción. Corrió, y buscó refugio en el único lugar que conocía: el armario de su habitación. Al cerrar la puerta tras ella, el silencio se tragó el ruido del exterior. Respiró aliviada, abrazándose las rodillas en la oscuridad. Los abrigos colgados le rozaban la piel como dedos fríos. El espacio se sentía más reducido, más sofocante, y aunque conocía bien ese lugar, esa vez había algo distinto.
El espacio, ese espacio al fondo que evitaba mirar, siempre había sido solo una sombra, un hueco de la madera, pero ahora, envuelta en la penumbra, el espacio parecía más grande, más profundo, casi como si esperara algo... o a alguien. Sintió un escalofrío recorrerle el cuerpo. Intentó no mirar, pero no pudo evitarlo. Sus ojos se deslizaron hacia ese espacio oscuro, y al instante supo que había cometido un error.
El vacío se movió.
Al principio fue como si algo en la oscuridad hubiera cambiado de forma. Pero luego fue evidente: la negrura no era estática, se alargaba, se hinchaba, serpenteando en dirección a donde ella estaba acurrucada. Noelia sintió sus latidos bombear en sus oídos, su respiración acelerándose mientras el aire en el armario se volvía denso, gélido. Quiso gritar, pero no pudo. Las palabras se le ahogaron en la garganta. Intentó abrir la puerta, pero el pomo no se movía. Estaba atrapada. ¡El aire olía a humedad, a madera podrida, a algo muerto!
Un sonido bajo y gutural emergió de la oscuridad, como si algo en ese espacio la estuviera espiando. Notó cómo el frío se apoderaba de su piel. Y entonces, desde el fondo del armario, escuchó un susurro. Un susurro apenas audible, que se deslizaba entre los abrigos, cada vez más cerca.
—Noelia...
El corazón le dio un vuelco. Sabía que nadie más estaba en la habitación, pero esa voz, ¡esa voz la llamaba, como si la conociera! Era un sonido húmedo, rasposo, como si las palabras vinieran de una garganta oxidada, quebrada. Quería correr, pero el terror la mantenía paralizada, y las manos inmóviles sobre la puerta cerrada.
—Noelia... ven.
La niña respiraba entrecortadamente. La sombra comenzó a arrastrarse fuera del rincón, reptando hacia ella; una masa negra que no tenía forma definida. Algo emergía del vacío, algo maligno, algo que había estado esperando. El aire olía ahora a moho y tierra húmeda, como si el fondo del armario estuviera podrido desde dentro. El susurro se transformó en una voz ahogada, burlona, y retorcida, que sonaba en el pequeño espacio, haciendo vibrar las paredes del armario.
¡De repente, sintió algo rozarle el tobillo!
Era frío, helado, y viscoso como una mano salida de la tumba. Gritó, por fin, pero su grito se ahogó en la oscuridad, y el contacto no cesaba. Algo, o alguien, estaba tratando de arrastrarla hacia el rincón, hacia el vacío que se había abierto como una boca hambrienta en el fondo del armario. Noelia pataleó, luchando por soltarse, pero la sombra era fuerte, más fuerte de lo que había imaginado. La oscuridad la envolvió, serpenteando alrededor de sus piernas, ascendiendo como una niebla espesa que la asfixiaba. Sintió la presión de su pecho, el latido de su corazón retumbar en sus oídos, mientras el frío se extendía por su cuerpo.
—Ven conmigo —dijo la voz, cada vez más cerca—. Lléname, Noelia. Lléname...
Era como si el vacío hablara a través de esa voz. El espacio, oscuro y sin fin, necesitaba llenarse con ella, absorberla, consumirla. Y en ese instante, supo que no era solo un rincón oscuro. Era un agujero en el mundo, un lugar donde lo que se perdía jamás volvía. Y ahora la quería a ella.
Sin embargo, ella era fuerte, muy fuerte y con un último esfuerzo, empujó con todas sus fuerzas, luchando contra la sombra que tiraba de ella hacia el fondo. La puerta cedió de repente, y cayó hacia adelante, rodando fuera del armario, jadeando en el suelo de su habitación. La luz del pasillo la envolvió, y al instante, la sensación de ser arrastrada desapareció. Los gritos de sus padres habían cedido, como una danza macabra del destino cuya música no dejaba de sonar en su mente. Miró hacia el armario, ahora entreabierto. El rincón oscuro estaba allí, quieto, como siempre. Pero ella sabía que el vacío seguía esperando, hambriento, acechando. Cerró el armario de golpe, sabiendo que esa noche no dormiría. El espacio oscuro y vacío había despertado, podía sentir la presión de su presencia al otro lado de la puerta, susurrando en la oscuridad, esperando el momento en que ella, vulnerable y sola, volviera a acercarse. Y sabía que, tarde o temprano, el armario volvería a abrirse.
Relatos al punto de tinta
Varios autores Editorial Independently published Edición 2022 Idioma Español Tapa blanda 319 páginas Peso del producto 549 g Sinopsis...