Don Melitón

La propuesta de la convocatoria juevera para este jueves, es nada más y nada menos que los JUEGOS, os acordáis o de vuestra infancia... Esta semana organizado desde el bello Blog de Moli:

Molí del Canyer donde podéis leer cómo participar, ha despertado en mi grandes recuerdos. Espero que os animéis a participar. 

La generación de niños y niñas que tuvimos la suerte de vivir nuestra infancia durante la década de los 60 y 70, pienso que fuimos unos niños privilegiados. Jugábamos al escondite, al juego del pillapilla, la comba, la rahola, al churro, media manga, era la forma más sana de divertirse, aparte de otros muchos juegos como los cromos, el trompo, las canicas, la botella, el corro la patata, etc. Ahora, la mayoría de los niños parece que se aburren, y que no saben cómo jugar y utilizan la tecnología. 

La propuesta de la convocatoria juevera para este jueves organizada desde el bello Blog de Moli: 👇👇

Moli del Canyer donde podéis leer cómo participar ha despertado en mí grandes recuerdos de mi niñez. 

Esta es mi participación:

Tenía ocho años y mi cabeza giraba como un torbellino. Inquieta y creativa, siempre estaba imaginando juegos y obras de teatro, pero lo que más me gustaba era jugar con mis amigas. Aquella mañana Lely, Victoria y yo salimos temprano hacia la escuela (en aquella época al colegio le llamábamos escuela). El día amaneció cálido para el mes de noviembre. Cuando llegamos a la puerta nos enteramos de que se habían suspendido las clases por una amenaza de bomba. Naturalmente, nos alegramos un montón. Regresé a casa y una hora después volvíamos a encontrarnos en la explanada del barrio. Cogimos nuestra goma de saltar y empezamos a jugar:

"Don Melitón tenía tres gatos, que les hacía bailar en un plato, y por la noche bailaban los tres al son del piano, de Don Melitón."

Cuando terminaba la canción teníamos que haber saltado la goma sin tocarla por ninguno de sus lados. Lely solía enfadarse porque me acusaba de que al estar hecha un fideo podía saltar más y siempre perdía, pero la realidad es que la pobre era la más torpe de las tres, yo tenía más agilidad, sin embargo, Victoria, se llevaba la palma, era mucho más alta que yo y más hábil, así que casi siempre ganaba ella. 

Iba ganando la primera partida, cuando de pronto oímos varias sirenas de policía, un furgón de antidisturbios pasó a toda velocidad ante la explanada. Nos asustamos tanto que corrimos a refugiarnos en casa. [No supimos el motivo hasta el día siguiente; por lo visto la policía había acordonado la escuela y tras varias horas había quedado en una falsa alarma]. 

Tras la merienda volvimos a encontrarnos en la explanada, pero esta vez jugamos a la comba:

"El patio de mi casa es particular, cuando llueve se moja como los demás... Agáchate, y vuélvete a agachar..." 

 Tú saltabas y cuando la canción decía; agáchate, mis amigas subían la cuerda por encima de ti y tenías que agacharte para que la cuerda no te tocara, o perdías. Después de un rato apareció Adelita con su caja Heno de Pravia llena de cromos de picar. Así que fuimos a buscar la nuestra: la mía era de Nívea, Lely y Victoria llevaban sus cromos en una caja de cartón de puros. A mí los que más me gustaban eran los de caras de angelitos. Solíamos tararear una cantinela cuando era el turno de una de nosotras: 

"Pica, que pica

con fuerza y destreza, 

pica, que pica

o perderás, 

y todos tus cromos

se llevarán" 

Pronto llegó el crepúsculo que anunciaba la hora de cenar y volver a casa. Así que como siempre nos despedimos quedando a primera hora de la mañana para ir juntas a la escuela. 

Estos son mis recuerdos y algunos de los juegos que jugué de niña, espero que os guste.