Este mes de Julio José Antonio Sánchez desde su blog Acervo de Letras nos propone crear una historia en la que el protagonista sea EL TATUAJE. Para más información pasa por su Blog 🖕
Y aquí mi aportación, sobre una época real de mi vida... 👇👇
Este Tatuaje y la persona que lo lleva, es la fuente de mi fortaleza.
Durante doce años desde que presenté mi primer libro, mi vida se había convertido en un auténtico caos. Las semanas pasaban rápidamente entre organizar y asistir a las tertulias semanales, participar y organizar exposiciones mensuales y semestrales, organizar recitales poéticos, acudir a entrevistas de radio y participar en programas semanales, presentar las novelas de otros autores y tener que asistir a toda clase de eventos donde me pedían apoyo; además de dedicar varias horas al día para escribir. Sin embargo, todo dio un giro de 180° el día que en cuestión de 48 horas sufrir dos Ictus por culta del estrés. Esto cambió mi forma de pensar. Estuve tiempo ingresada y un año de rehabilitación para recuperar la movilidad del lado izquierdo de mi cuerpo. Entonces cogí depresión y decidí retirarme de la vida pública, dejé la presidencia de la asociación que había fundado para dar visibilidad a las mujeres artistas, la asociación solidaria Asav donde era miembro activo tanto en la cercanía con las familias necesitadas como en la junta, cerré mis blogs con más de 18000 seguidores y estuve ausente hasta que un día mi hija Nuria se presentó en casa: se había hecho un tatuaje en el brazo, algo que yo siempre había estado en contra. Yo, al verlo lloré de emoción como una magdalena, pero al oír sus palabras parecía las cataratas del Niágara.
"—Mama, —dijo con una sonrisa en el rostro y un brillo en sus ojos que jamás podría olvidar— este tatuaje me lo he hecho no solo porque eres mi madre, sino porque eres la mujer más fuerte que conozco, vas a superar esto, vas a terminar tu novela y vas a seguir escribiendo porque es lo que más te gusta, lo que llena tus días; mama, cuando escribes tu rostro es radiante y tu felicidad es nuestra fortaleza. Has pintado varios cuadros con éxito sin ser pintora, hiciste una escultura que sorprendió al director del museo he incluso a escultoras profesionales; has salido en televisión, cuando te propones algo lo logras porque eres fuerte y decidida. Este tatuaje es para darte y recordarte la fuerza y la constancia con la que nos has hecho sentirnos tan orgullosos de ti. Si no quieres escribir que sea porque ya no te aporte nada, no porque la vida te haya puesto un obstáculo. Siempre nos has dicho qué si la vida te pone una piedra en el camino, la saltemos y sigamos adelante, pues bien ahora eres tú quien ha de hacerlo."
Miré a mi hija y durante al menos cinco minutos en los que permanecí en silencio preguntándome de donde había sacado la madurez para hablar con tanta elocuencia. La veía ¡tan joven!. Después era incapaz de hablar, solo lloraba mientras mi hija me abrazaba y mi marido emocionado se retiraba para que lo viera llorar. Desde ese día, durante un año aparecía diariamente por casa, me enseñaba el tatuaje y me decía:
—Mama, cómo va la investigación de la novela, ¿te queda mucho?. Te quiero un montón.
Desde que era una niña siempre fue y es muy cariñosa. Hasta que una tarde llegó sonriente y me dice:
—Mama, Ana la alcaldesa, me ha llamado y quiere presentar tu novela en el auditorio de la biblioteca. Dice que en cuánto la tengas le pases el borrador para preparar la presentación, y le he dicho que sí. No, no hay vuelta atrás. Tienes tres meses para terminar y dársela a Ana.
Me abrazo con fuerza sin darme tiempo de reacción. Así que volví a abrir mi blog. Evidentemente, al cerrarlo muchos seguidores quedaron fuera y nada más había unos doscientos; pero me obliga a escribir a diario y mantiene mi mente activa. Terminé la novela, la presente, y aún no he dejado de escribir, aunque esta vez a mi aire sin sobrecargarme y cuando me apetece, porque en los últimos meses he sufrido un duro golpe de salud que tiró mi moral por los suelos, pero mi hija ahí sigue recordándome a diario su tatuaje y con él, el motivo por el cual se lo hizo. Su tatuaje para mí es cómo un talismán.
Algunas veces no nos queda más opción que volver a comenzar, claro que si estamos acompañados en ese reinicio las cosas parecen más sencillas.
ResponderEliminarSaludos,
J.
Cierto José, gracias, un abrazo.
Eliminar👏🏼👏🏼👏🏼👏🏼👏🏼
ResponderEliminarEs la mejor manera que se me ocurre de empezar este comentario (las lágrimas me las guardo calentitas).
Felicidades, Nuria. Nuestros hijos son nuestra fuerza y la tuya es una maravillosa preciosidad.
Poco a poco, voy conociendo a los miembros de la familia acervolense y no puedo estar más contento de lo grandísimos que son. Tú, a partir de ahorita mismo, serás nuestra guerrera, el emblema de la lucha y la superación. Así que, mucho ánimo y sigue luchando. 💪🏼💪🏼💪🏼💪🏼
Muchísimas gracias por compartir este relato tan íntimo y emotivo, Nuria. Sabía que el tema de este mes podía traernos cosas muy interesantes, pero siempre superáis mis expectativas.
Abrazo grande y animoso.
Muchas gracias José Antonio, por tus palabras de apoyo que siempre engrandecen y fortalecen el alma. Y aquí sigo en la brecha. Un fuerte abrazo.
EliminarUauhhh. Me he emocionado mucho.
ResponderEliminarNadie te conoce mejor que tu hija, así que adelante con todo.
Me ha encantado tu emotivo relato que nos hace conocerte un poco mejor y nos da fuerza a los demás.
Te envío un caluroso abrazo.
Muchas gracias Amaia, si con ello doy fuerza para luchar contra corriente, ya es un logro para mi. Un fuerte abrazo
EliminarHola Nuria.
ResponderEliminarUn bonito relato para conocerte un poco más. A ti y a tu hija, fan tuyo número 1. Gracias por abrirnos la puerta.
Un abrazo de Marlen.
Gracias Marlem, un abrazo.
EliminarQue preciosidad de relato. Emotivo, duro y emocionante. Las mejores lágrimas son sin duda las de felicidad y el mejor amor, sin lugar a dudas, es el de una madre con sus hijos. Tu has criado muy bien a tu hija y en ella tienes un gran apoyo y fortaleza. Enhorabuena por partida doble: por ser como eres y por haber formado a una maravillosa persona. Un abrazo Nuria
ResponderEliminarMuchas gracias Sonia por tus hermosas palabras, qué no haría una madre por sus hijos, y la verdad es que tengo tres y son maravillosos. Un fuerte abrazo
EliminarGracias por compartir Nuria. ¡Qué bueo que tienes quien te acompañe en tus procesos y te da ánimos y fuerza! Tu hija tiene razón, escúchala y haz lo que te gusta que lo haces muy bien. Te mando un abrazo.
ResponderEliminarMuchas gracias Ana, la verdad es que mi hija es mi mano derecha. Te mando otro abrazo.
EliminarYo tambien soy algo "escéptico" a los tatuajes, pero en lo que nos cuentas ese tatuaje tiene una gran historia. Yo diria que SI, que esos obstáculos de la vida los has vencido. Nos has compartido un instante admirable.
ResponderEliminarGracias José por tu visita y comentario, la verdad es que me salió del alma. Saludos
EliminarCreo que una de las mejores maneras de educar a los hijos es con el ejemplo. No me cabe duda de que en este caso, el enorme acto de amor de esa hija al hacerse ese tatuaje, su perseverancia y su entrega son fiel reflejo de lo que ella ha visto en casa. Sois muy afortunados por teneros unos a otros.
ResponderEliminarUn abrazo!
Los tatuajes siempre llevan una gran carga emotiva detrás, un motivo importante para quien lo luce con orgullo y en la mayoría de ocasiones son un homenaje a los seres más queridos e importantes de nuestras vidas! A seguir disfrutando de la escritura! Un abrazote!
ResponderEliminarGracias Marifelita, un abrazo
Eliminar¡Hola, Nuria! Qué historia más bonita, emotiva, tierna, simbólica..., y podría seguir añadiendo adjetivos. Tu tatuaje, vamos, el de tu hija, da para más de un relato, sin duda, se lo hice por una buena causa y eso tiene mucho más valor. Un gran hecho para una gran persona.
ResponderEliminar¡Cuídate!
Un gran abrazo. :)
vaya acicate!!
ResponderEliminarsupongo que todo es bastante real porque veo la foto, y hay pocos motivos mas para que una hija se haga ese tatuaje. Ese no es uno de esos tatuajes que no te acostumbras a ver. Cda vez te recordara ese episodio
abrazoo