Las ultimas semanas

ENCUENTRO JUEVERO DEL 24 DE OCTUBRE 

Bases y participantes en el blog de la anfitriona Mónica

           COLLAGE DE PALABRAS

Pienso que la delicadeza de la vida se esconde en los detalles más pequeños, como el instinto que guía mis pasos. A veces, siento que mi alma tiene algo de gótico; subo al desván, y miro el baúl cuyo interior me hace disfrutar de mis anhelos y me invita a soñar, pensando que es ahí donde la realidad se revela en sus formas más extrañas.

Las últimas semanas he estado en una especie de viaje, no físico, sino mental, una exploración que siento como una posesión sobre mí. Me dejo llevar por la estética oriental, que me atrae como una tentación especial; una llamada inmediata de la flor de loto, tan mansa que me hace sentir que el océano es mi refugio, cuál vasto universo que me enseña a vivir con el mínimo, apreciando algo tan simple como un puñado de almendras o el sabor fresco de las frutas. En ese punto encuentro una paz mayor que cualquier cosa masculina, algo tan relajante como el canto de una ballena.

Es un espacio para invertir tiempo en pensamientos, mientras las estrellas me guían como magos a través de la noche. Desde la terraza, observo el paisaje de la península, el olivar y el terrible secreto que guarda, además del silencio que a medianoche es una carga.

Mi colección de recuerdos es tan excelente como inolvidable, una síntesis de momentos que me recuerda lo que significa estar viva. Y siempre, gracias al universo, a sus indicaciones, inquietantes, pero efectivas. Sigo adelante, buscando lo especial en cada gesto y descubro, en la mirada de un pajarito, lo vacía que es la soledad.