Convocatoria del jueves
No A LaS DrOgAs
26 de junio se celebra el Día Internacional de la Lucha contra el Uso Indebido y el Tráfico Ilícito de Drogas. Este día, instaurado por la Organización de las Naciones Unidas, busca concienciar a la población sobre la importancia de la prevención, el tratamiento y la rehabilitación en relación con las drogas.
“Las drogas destruyen tu memoria y tu propio respeto"
"Tu salud es tu riqueza, di no a las drogas”
Más información aquí Campirela
Mi participación
Hubo un tiempo en que mi existencia era una penumbra viscosa. El letargo de cada amanecer me encontraba con los ojos huecos, el alma disuelta entre jeringas y promesas rotas. Fui esclavo de la heroína, ese espectro seductor que al principio acaricia y luego devora. Recuerdo el llanto de mi madre detrás de la puerta, la mirada exánime de mi padre, que cada día parecía despedirse un poco más de su hijo. Mis amigos se esfumaron como neblina al sol, y yo, envuelto en delirios, no distinguía compasión de lástima ni realidad de alucinación.
Tocando fondo me hallé: solo, famélico, tullido de esperanza. Fue en ese abismo donde vislumbré una rendija de luz. No por virtud, sino por necesidad vital ya que vi la guadaña aproximarse, y articulé la súplica que jamás creí capaz de pronunciar: “Ayúdenme.”
Ingresé a un centro de rehabilitación sin certezas, salvo una: o moría o renacía. El proceso fue una odisea: convulsiones, insomnio voraz, terrores nocturnos que me arrancaban los gritos del pecho. Pero también encontré almas rotas como la mía, guerreros sin armadura.
Poco a poco, las grietas de mi espíritu comenzaron a llenarse de propósito. Redescubrí el afecto de mi familia, quienes, pese a mis traiciones, nunca sellaron la puerta. Aprendí a escuchar el silencio, a tolerar la espera, a no temerle al vacío. Hoy llevo tres años sin consumir. No me proclamo salvado, pues sé que la adicción es un sonido que nunca calla del todo. Pero he aprendido a vivir sin obedecerlo.
Mi historia no es heroica. Es simplemente humana. Pero si alguien, perdido en la ciénaga del consumo, lee esto, que sepa: hay salida. No es fácil, no es rápida, pero es posible. Basta una chispa de voluntad y una red dispuesta a sostenerte cuando ya no puedas caminar solo.
Yo vi la luz. Y aunque tenue, supe seguirla.
Gracias, Nuria, espectacular el relato que nos dejas, es un hito a que todo si se quiere uno puedo superarlo , cuesta , pero con esfuerzo se sale.
ResponderEliminarUn ejemplo de superación.
Ojalá si alguien tiene un problema lo lea y sepa que de todo se sale , si tienes ayuda tanto mejor. Un besazo y un fuerte abrazo.
Ojalá Campirela, un abrazo y feliz fin de semana
EliminarOlá, querida amiga Nuria!
ResponderEliminarAssim acontece no período de abstinência de todos os vícios, bem sabemos por tudo que lemos ou sabemos.
Todas as drogas são maléficas, as no sentido literal e às demais.
Um conto bem contado, tim, tim, por tim, tim.
Que o mundo se liberte das dependências"
Tenha dias abençoados!
Beijinhos fraternais
Ojalá sea así, querida amiga Roselia, que el mundo se libre de las drogas. Un abrazo
EliminarHola Nuria, sin dudas el tuyo es un mensaje esperanzador, me gustó mucho tu historia, un abrazo.
ResponderEliminarPATRICIA F.
Gracias Patricia, me alegra que te guste. Un abrazo y feliz fin de semana
EliminarMe gusto tu relato. transmite esperanza. Te mando un beso.
ResponderEliminarGracias Alexander, otro para ti. Besitos
EliminarAunque es muy complicado, se puede salir de las drogas, aunque es muy fácil volver a recaer. Tu relato es un reflejo de una dura realidad, con final esperanzador.
ResponderEliminarUn abrazo Nuria.
Cierto María, es complicado pero se puede. Un abrazo
EliminarMenos mal que vio la luz y tuvo un asidero donde agarrarse pero mucho buscan un motivo que nunca llega y están atrapados, perdidos quizá condenados.
ResponderEliminarUn saludo de Buscador.
Cierto compañero, las drogas te atrapan entre sus brazos y es muy difícil salir. Un abrazo y feliz fin de semana
EliminarMuy emotiva y esperanzadora historia narrada en primera persona, Nuria. Hace bien leerla. Gracias por ello. Un abrazo
ResponderEliminarGracias Mónica, besitos y feliz fin de semana
EliminarQué bien describes el proceso de destrucción de la persona a causa de las drogas.
ResponderEliminarMe ha gustado mucho tu texto.
Gracias, Nuria.
Un abrazo.
Gracias Carmen, un proceso que debe ser horrible. Un abrazo y feliz fin de semana
EliminarCaminas en la oscuridad y no vislumbras el amanecer... pero ahí esta, ahí esta.... la puerta de alcalá
ResponderEliminarMírala, mírala, mírala, ahí está... Como dice la canción. Un abrazo
Eliminar"Guerreros sin armadura", que bella definición hacia aquellos que luchan por salir de esta trampa en la que han caído. En tu relato hay esperanza y eso es fundamental para tomar la determinación de salir de ese pozo sin fondo.
ResponderEliminarGracias Tracy, es importante mantener viva la esperanza ante los avatares de la vida, y la droga es un demonio cruel. Un abrazo y feliz fin de semana
EliminarAunque no lo parezca, según cuentan, lo más difícil es lo que parece más facil: pedir ayuda. Cuando se es consciente , ya sabes hacia dónde ir y no seguir dando bandazos hacia ningún lado.
ResponderEliminarAbrazooo
Hola Nuria,
ResponderEliminarMe ha encantado tu relato, una historia dura pero muy real. Las personas que caen en las drogas a menudo es porque se sienten solas y abandonadas o bien al caer en ellas es cuando todo el mundo les da la espalda. Efectivamente hay muy poca gente que pueda salir de ellas y contarlo. Solo dos caminos: muerte o renacimiento. Un abrazote!
Es la historia de un duro regreso, necesario para no morir.
ResponderEliminarUn abrazo.
Ojala y que todos hubiesen regresado.
ResponderEliminarUn besazo!