Desde El Tintero de oro nos hacen la siguiente propuesta:
Escribir al desamor, ya sea producto de una infidelidad, por la pérdida del cariño o a causa de la monotonía. Satírico, trágico, humorístico,…
Requisitos Aquí
El silencio ahogaba mi pecho y me arrebataba el aire. Con la mirada inerte por su ausencia, recordé que todo tuvo sentido; la rutina alargó el desenlace. Y no es que fuera una persona ambigua, si no más bien definí ese instante en que el botón tocó el final de la historia.
Una historia amarga como la hiel que no dejó cicatrices, solo un recuerdo que se asemeja más al cianuro que a un buen helado.
¡Cómo pude poner mis ojos en ese trilero!
Recapitulo:
Me quedé con las ganas de ser una auténtica gata, clavándole mis uñas, al estilo Catwoman, en vez de simplemente mandarlo a hacer puñetas, cerrando la puerta con un sonoro portazo.
Y sé que me he quedado sola, con mi soledad. Bueno, no, con Canelo que mueve el rabo insistente; hora de su paseo.
Pero espera: ras, ras, ras... Una, dos, así hasta diez, todas las fotos volaron hasta el cubo de basura. En realidad, acabo de descubrir que llevo mejor el desamor con ironía, que el amor en el sentido literal de la palabra.
Mi presente no es efímero, soy una mujer que lo ha conseguido todo en la vida, excepto el amor y ser madre; no obstante, no tiro la toalla. Las piedras que la vida coloca, se sortean o se saltan y a otra cosa mariposa.
Vamos, Canelo, ya me cansé de hablar conmigo misma. Manda huevos la paranoia que provoca el desamor. ¡Será posible, con 35 tacos y hablando sola!
Hola, Nuria. Muchas gracias por participar en el reto al desamor. Un abrazo.
ResponderEliminarUn placer Bruno, un abrazo y feliz fin de semana
Eliminar35 anos é já uma idade que dá pouca margem para futuro. Porém, enquanto há vida... Vale a pena esperar por dias melhores.
ResponderEliminarDesejo-lhe muita sorte.
Abraço de amizade.
Juvenal Nunes
Gracias Juvenal, por suerte la vida es una caja de sorpresas y estoy segura que la protagonista tendrá suerte. Un abrazo
EliminarBoa noite, amiga Nuria,
ResponderEliminarHistória muito interessante aqui nos traz. São situações como estas que trazem a infelicidade e desalento. No entanto, estar 35 anos nesta situação, é muito tempo a permitir-se ser ser infeliz. Mas...a esperança é sempre a ultima a morrer.
Beijinhos e bom fim de semana!
Mário Margaride
Beijinhos!
Mário Margaride
http://poesiaaquiesta.blogspot.com
https://soltaastuaspalavras.blogspot.com
Totalmente de acuerdo contigo amigo Mario, sin perder la esperanza de que su vida cambie. Gracias por tu visita, siempre llena de luz, un abrazo fuerte y feliz fin de semana
EliminarA veces es mejor estar con una mascota fiel y sola que con alguien que no te ama. Me gusto tu relato. Te mando un beso.
ResponderEliminarCierto Alexander, mi madre decía siempre... Mejor sola que mal acompañada... Y a veces es lo mejor. Un abrazo grande y feliz fin de semana
EliminarEncontrará quien la merezca pero como bien dices, mejor sola que mal acompañada y seguro que Canelo de momento, cumple.
ResponderEliminarUn besazo!
Jajaja, seguro que sí Morella, un abrazo
EliminarMe encantó ese final: "a otra cosa mariposa", y si es mejor así si la cosa no funcionaba, seguramente a la vuelta de alguna esquina encontrará el amor y sino una mascota es una buena compañía.
ResponderEliminarMe gusto tu historia y el ritmo que le pusiste.
Un abrazo Nuria.
PATRICIA F.
Gracias Patricia, hay que poner un poco de humor, un abrazo
EliminarHola, Nuria, muy bien expresado tu "desamor", con cierto toque irónico y de humor. Me hizo gracia lo de "trilero", bien utilizado el vocablo.
ResponderEliminarBuen aporte al reto.
Un abrazo. :)
Gracias Merche, me alegra que te haya gustado. Un abrazo
EliminarEse desamor nació como consecuencia de la incomprensión y seguro que su mascota le será de buena compañía. El hablar sola ayuda a entender mejor lo que pasó
ResponderEliminarUn abrazo Nuria.
Puri
Así es Dulcinea, ella misma levantó su autoestima. Un abrazo
EliminarHola, Nuria.
ResponderEliminarA veces es mejor hablar sola que mal acompañada, y aquí por lo que muestra tu relato es la mejor opción, ja, ja, ja.
Y las mascotas son literalmente amigos más fieles y cariñosos, dan sin esperar nada a cambio, y con un amor infinito.
La ironía nos salva, vaya si es así, :)
Besos.
Totalmente Irene, hablar solo descarga el dolor del alma, y la compañía de una mascota ayuda a olvidar y dar carpetazo. Un abrazo fuerte
EliminarHola, Nuria, un micro certero, poner remedio al dolor o a la equivocación, es de valientes y decididos, como dice una canción, ma palante vive gente, ja, ja.
ResponderEliminar"Amarse con los ojos abiertos", es el título de un libro de Jorge Bucay y Silvia Salinas y hay uno que se titula "Los límites del amor" de Walter Riso, ambos muy buenos, creo que tu protagonista leyó al menos uno de estos, ja, ja. Por suerte no está tan sola como piensa y el tiempo hará que conozca el amor de verdad. Buen mes de marzo.
Hola Harolina, no conozco ninguno de los dos libros que mencionas, pero me los apunto. Cómo bien dices siempre hacia delante sin mirar atrás. Un abrazo y feliz domingo
EliminarNuria, si entras en mi blog, en la cabecera verás la pestaña PDF libros, allí encontrarás esos dos libros que menciono, no se si te permite descargarlo en seguida o si tienes que solicitar el permiso y me llega una notificación para dar el permiso, así es como regularmente funciona. Cualquier duda me dejas saber. Un abrazo.
EliminarCon 35 años hay tiempo para todo y la espera es más llevadera poniendo un Canelo en tu vida.
ResponderEliminarMe ha encantado tu micro.
Un abrazo.
Gracias Macondo, me alegra que te haya gustado. Un abrazo
Eliminar"A otra cosa mariposa" es una frase que demuestra que, realmente, es una mujer que lo ha conseguido todo. Con semejante forma de ver la vida, estoy seguro, el desamor no acabará con ella.
ResponderEliminarUn saludo.
Así es Necco, un abrazo
Eliminar¡Hola Nuria! Buen relato de desamor, en el que se ve que la protagonista tiene herramientas de sobra para superar este bache en el camino pronto. Muy bien narrada esa sensación inicial que nos deja el desengaño.
ResponderEliminarUn saludo.
Gracias Rocío, me alegra que te haya gustado. Besitos
EliminarHola Nuria. El desamor con ironía se lleva mejor, como todo en la vida. De momento tiene a su gato, que aunque los gatos son muy suyos este parece que le es bastante fiel. Toca seguir buscando. Un abrazo.
ResponderEliminarEso parece, gracias Jorge, un abrazo
EliminarMe gusta sobre todo que el desamor se percibe como un principio, más que como un final. Porque los finales también son principios, y eso hay que saber verlo.
ResponderEliminarLa vida sigue, la protagonista opta por ironizar, que es una de las mejores formas de desmontar una situación, y escoge su soledad, o casi, que ahí está Canelo.
El estilo es claro y directo, hasta divertido, y transmite de la protagonista decisión y autoafirmación; reconforta sentir como supera esa situación, hace de su capa un sayo y se echa a la calle a pasear con Canelo. Le irá bien.
Un abrazo.
Gracias Isra, siempre he penado que poner un punto de humor cuando algo se cierra es la mejor opción, deprimirse no soluciona nada, hay que afrontarlo y ya edtá. Un abrazo
EliminarHola, Nuria. Dicen que la gente que usa la ironía es más inteligente. No lo sé, pero seguro que cualquier forma de humor ayuda a sobrellevar las cosas negativas.
ResponderEliminarUn abrazo
Totalmente de cuaerdo Mirna, un abrazo
EliminarEs un texto breve y vibrante que mezcla desamor, ironía y resiliencia con un tono fresco y desenfadado. El inicio, con el silencio que “ahoga el pecho”, crea una atmósfera intensa, pero pronto evoluciona hacia un monólogo interno lleno de humor y autocrítica. Me encanta la comparación del recuerdo con “cianuro” frente a un “buen helado” y el reproche al “trilero” que la engañó. La narradora, con su deseo frustrado de ser una “gata” vengativa y su relación con Canelo, es cercana y auténtica. El acto de rasgar fotos y el cierre optimista (“a otra cosa mariposa”) reflejan su fortaleza. El estilo es coloquial y ágil, me ha encantado.
ResponderEliminarUn abrazo Nuria.
Gracias Marcos, me alegra que te haya gustado, un abrazo y feliz fin de semana.
EliminarMe gustó mucho el giro de lo que parecía un desamor insuperable a otra cosa mariposa. Muy bueno Nuria. Un abrazo!
ResponderEliminarGracias Lulita, me alegra que te guste, un abrazo
EliminarNunca hay que perder la esperanza, una mujer que habla con su gatito (no está sola) es alguien profundo que tarde o temprano encontrará su similar y si no, le sobra humor para lo que sea ;)
ResponderEliminarUn besote :)
Así es Maite, un abrazo grande
EliminarA otra cosa mariposa y con buena compañía de Canelo. Un abrazo.
ResponderEliminarExacto Mamen, jeje, un abrazo
EliminarHola, Nuria:
ResponderEliminarQué bien retratas esa mezcla de lucidez y humor que aparece cuando el corazón se quiebra, pero no se rompe del todo. Me ha gustado cómo la narradora pasa del nudo en el pecho al “a otra cosa mariposa” sin perder autenticidad ni dignidad. Esa voz irónica, tierna y resistente es todo un acierto.
Y qué importante es eso que planteas: el desamor no tiene por qué doler a lo grande para ser real, y no hace falta que deje cicatrices para enseñarnos algo. Con Canelo a su lado y ese monólogo tan humano (y tan gatuno), esta mujer demuestra que saberse sola es a veces el primer paso para estar mejor acompañada.
¡Un saludo!
Muchas gracias Tarkion por tu visita y comentario, me alegra que te haya gustado. Saludos
EliminarHola Nuria, me encanta como has abordado el reto, como suele decir el refrán más vale solo que mal acompañado, si no es recíproco no es el lugar adecuado.
ResponderEliminarUn abrazo.
Gracias Dakota, un abrazo fuerte
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