La avaricia que proviene de la luna, es la lujuria que termina en el pozo de la muerte y acaricia la sangre satírica que brota del corazón, para romper la perversa espera que se apodera del alma.
—¿Todo eso te enseñaron desde la tumba Drácula?
—Vampiria, la vida es pasajera, la muerte duradera.
—¿Te burlas?
—!No! Era una broma.
Le clavó una estaca en el corazón.
¡Ahora si es eterna, engreido, — farfulló.
Todos los inmortales tiene tiempo para volverse engreídos por demás.
ResponderEliminarSaludos,
J.
Pues si... Jajajaja. Gracias José por tu comentario, un abrazo
EliminarBuen micro, Nuria. Hay que andarse con cuidado con los portadores de estacas, je,je. Un abrazo
ResponderEliminarGracias J. R. Infante por tu comentario y visita a mi blog. Un fuerte abrazo
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