Descubrí
que no hay sol sin cielo
ni
amor sin dolor,
que
el alma perece en el cielo
y
su soledad es aún mayor.
Descubrí
sosiego en el amanecer
y
decidí no buscar el ayer.
Comprendí
los valores de la vida
y
la soledad del anochecer.
Hoy navego hacia un rumbo sin mares
de
aromas opacos y nubes grises
que
ahogan en las profundidades
el
dolor de todas las madres.
© Nuria de Espinosa
La
reflexión es aquello que abre un camino al pensamiento, el pensamiento es el
camino que conduce a la reflexión; aquel camino libre que resplandece entre
luces y sombras: la vida.
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Disfruté tus versos, poetisa.
ResponderEliminarEspecialmente aquello de:
...Descubrí sosiego en el amanecer
y decidí no buscar el ayer...
Abrazotes, amigaza.
Beto Brom desde Israel
Bello poema, Nuria. Leo tu libro y no tardaré en darte mi opinión al respecto.
ResponderEliminarUn abrazo
Gracias J.R Infante, espero que sea de tu agrado, abrazos del alma.
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