He pasado tiempo buscando respuestas, intentando entender por qué la vida a veces duele, por qué las cosas no salen como uno espera. Me pregunté una y otra vez qué sentido tenía todo. Pero hoy, mientras el sol acaricia mi rostro y escucho la risa de un niño en la calle, algo dentro de mí se aquieta. Comprendo que no todo tiene que entenderse para ser amado. Que la vida, con sus giros inesperados, sus luces y sus sombras, simplemente es. Y en esa simple existencia hay belleza.
No quiero seguir preguntándome “por qué”. Quiero vivir, sentir, agradecer. Amar la vida no cuando sea perfecta, sino porque es única, porque es ahora. Porque en su imperfección está el milagro de estar viva. La vida no está hecha para ser entendida en cada detalle, sino para ser abrazada con todo lo que trae. Cada suspiro, cada lágrima, cada risa, es parte del viaje. Y yo decido amarlo todo. Porque cuestionar tanto me ha quitado momentos, y hoy solo quiero presencia, paz, y gratitud. Vivir sin condiciones. Amar sin razones. Existir sin miedo.
Creo que.....si tengo creencias..... creo que esa pregunta de por que existimos, la ha tratado de responder la humanidad desde miles de angulos.
ResponderEliminarPero lo mejor es eso, vivir..... es una postura segura porque mas alla de existir las respuestas al porque han sido mera especulacion.
Cada dia trae su afan.....
Gracias José por tu magnífica opinión, un abrazo
EliminarLeo y tus palabras tan profundas como reflexivas, y me encuentro con un acto de rendición, no tanto en el sentido de derrota, sino más bien como una reconciliación con el sentido de estar vivo.
ResponderEliminarComo un aceptar la vida tal como es, sin necesidad de comprender cada uno de sus aspectos, quizás se entrecruce bastante de espiritualidad, pero está muy bien disimulada por ese toque que se diluye en el texto que muestra esa necesidad que todos tenemos de encontrar sentido en medio del sufrimiento.
A veces y en eso estoy de acuerdo, no todo necesita explicación para que sea valioso también deberíamos amar lo sencillo, sin pedir tantas explicaciones.
Quizás sea una forma bastante lucida de estar en el mundo agradeciendo y sin miedos.
Yo diría que quien insiste en entender la vida se pierde el milagro de sentirla, solo quien la abraza sin preguntas descubre que el misterio también sabe amar y nos puede deleitar.
Me gusta tu blog, intentaré estar cerca.
Gracias Agapix, me alegra que mi blog te guste. Tus palabras me parecen muy acertadas y el final abrumador....
Eliminar"Yo diría que quien insiste en entender la vida se pierde el milagro de sentirla, solo quien la abraza sin preguntas descubre que el misterio también sabe amar...
Qué maravilla. Un abrazo
Que texto lindo e profundamente tocante!
ResponderEliminarEle ressoa como um abraço reconfortante para a alma, lembrando-nos da beleza das pequenas coisas, da simplicidade do momento presente. A maneira como você capturou a essência da aceitação, da paz e da gratidão é tão delicada e verdadeira. A vida, com suas imperfeições, realmente se torna mais significativa quando abraçamos cada instante com amor e presença. Que suas palavras continuem a espalhar essa luz serena e essa sensibilidade que tanto tocam o coração.
BEIJOS💖
Muchas gracias Celia, me alegra que te haya gustado. Un abrazo grande y feliz domingo
EliminarTodas las respuestas están en ese apreciar la simpleza de la vida.
ResponderEliminarUn beso dulce y dulce semana.
Otro para ti Dulce, besitos
EliminarProfunda reflexión yo creo que estamos en este mundo por una razón y debemos aprovechar cada minuto. Te mando un beso.
ResponderEliminarGracias Alexander, besitos
EliminarTe entiendo, Nuria, soy excesivamente convulsa, siempre necesito saber el qué, es algo que me delimita, a veces por más que queramos se nos hace imposible luchar a contracorriente.
ResponderEliminarY luego de la nada aparece ese momento que cede aire y momentáneamente nos rescata.
Precioso canto a la vida y sobre todo a la aceptación.
Un beso enorme.
Hola Irene, me alegra saber que te ha gustado. Un abrazo y feliz domingo
EliminarUn texto que fluye preciso y próximo. Gracias.
ResponderEliminarPorque cumplir con patrones, para que trabajar tanto perdiendo tiempo de leer pintar esculpir escribir... yo sólo quiero vivir sin tener que arrepentirme de esa oportunidad que tantos desechan... la vida es un soplo, y un soplo dura una vida.
ResponderEliminarY un solo pasa a veces tan rápido que no nos damos cuenta. Un abrazo
EliminarHola Nuria, me ha gustado mucho tu reflexión porque quizás de alguna forma todos hemos sentido esa sensación, ese querer tener la certeza en tantas cosas de la vida que no la necesitaban. Espero que ya estés totalmente recuperada de tu intervención, yo también ando convaleciente de un problema en la retina y explorando aplicaciones que me permiten ver los blogs a través del sonido como los audio libros. Un abrazo
ResponderEliminarHola neuriwoman espero de corazón que tú problema de retina se solucione, yo estoy mucho mejor, parece que por fin el cuerpo acumula el tratamiento. Gracias y un abrazo gigante
EliminarMuito interessante!
ResponderEliminarBjxxx,
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Gracias Teresa, besitos
EliminarOlá, querida amiga Nuria!
ResponderEliminarNo quiero seguir preguntándome “por qué”. Quiero vivir, sentir, agradecer
Perfeito!
Nem perguntas alheias nem as nossas podem nos embargar de viver.
Gostei da maturidade do seu post.
Tenha dias abençoados!
Beijinhos fraternos de paz
Hola querida amiga Roselia, la vida a veces son algo más que preguntas, aunque no podamos evitar hacenoslas. Un abrazo
EliminarMuy buena reflexión. Y si el sentido ¿fuera aprovechar y disfrutar?
ResponderEliminarUn besazo!
O quizás ambas cosas? Gracias Morella, un abrazo
EliminarA veces nos ahogamos en un vaso de agua y sin embargo, parece que nos ahogamos en el Titanic. Nos sentimos perdidos con un halo de angustia mientras el mundo se nos cierra sin ver un horizonte o una solución. Buscamos esa explicación que nos llene ese hueco del corazón y hasta nos revelamos mas que nada, en una guerra interior...Miles de cosas nos suceden donde no hay una explicación clara. Dudamos hasta de lo divino mientras caminamos en esta tierra de nadie donde nos cuestionamos muchas cosas y, sentimos que estamos perdidos, perdidos irreconocibles e incomprendidos. Son momentos delicados para nuestro equilibrio emocional y a veces tomamos rumbos equivocados para estar mas perdidos si cabe...Estas son cosas que nos trae la madurez casi siempre en nuestra juventud y adolescencia. Cuando una persona sobresale en inteligencia o tiene unas aptitudes que destacan, puede caer fácilmente en esos pozos existenciales. La enfermedad acecha cuando no hay una educación y puede que a todo lo largo de su vida, esa falta viva para siempre en su interior...Creo que ser una persona corriente tiene mas virtudes que defectos. Hoy escuché en la radio que chicos jóvenes enferman por esa falta que se llama educación y su pulso de vida es de los padres que no saben llevar ni la suya propia. Me asomo al abismo ajeno y casi me caigo...
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